
Los agujeros negros pueden girar en la misma dirección que los discos denominándose agujeros negros progrado) o en dirección contraria: agujeros negros retrógrados. Durante décadas los astrónomos creían que cuanto más rápido giraba un agujero negro, más potente era el chorro, pero hay problemas con este 'paradigma de giro', por ejemplo el que algunos agujeros negros progrado no emiten chorros.
Un estudio de David Garofalo y su equipo del Jet Propulsion Laboratory de la NASA en Pasadena (California) que las galxias emisoras de radio más distantes son mantenidas por agujeros negros retrógrados, mientras que las ´relativamente cercanas y no radio-emisoras contien agujeros progrados. Según dicho equipo, los agujeros negros supermasivos evolucionan con el tiempo de estado retrógrado a progrado.
Los chorros y los vientos de los agujeros negros juegan un papel clave en el destino de las galaxias. La investiogación demuestra que los chorros pueden retardar e incluso impedir la formación de estrellas no solo en la galaxia que los contiene sino en otras galaxias cercanas.

The black holes can spin either in the same direction as the disks, called prograde black holes, or against the flow -- the retrograde black holes. For decades, astronomers thought that the faster the spin of the black hole, the more powerful the jet. But there were problems with this "spin paradigm" model. For example, some prograde black holes had been found with no jets.
The results from the study of David Garofalo of NASA's Jet Propulsion Laboratory in Pasadena and his team, showed that more distant radio-loud galaxies are powered by retrograde black holes, while relatively closer radio-quiet objects have prograde black holes. According to the team, the supermassive black holes evolve over time from a retrograde to a prograde state.
Jets and winds play key roles in shaping the fate of galaxies. Some research shows that jets can slow and even prevent the formation of stars not just in a host galaxy itself, but also in other nearby galaxies.
Tomado de/Taken from Science Daily
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